La cantante estadounidense Ariana Grande, que se declaró «destrozada» por el atentado terrorista en Manchester, en Inglaterra, regresó a su casa, ubicada en Boca Ratón, Florida, donde fue recibida por familiares y su novio, Mac Miller.
La cantante desembarcó en la ciudad con la apariencia abatida y con los ojos enrojecidos en su regreso a Estados Unidos, donde la esperaba su novio. La pareja tuvo un emotivo encuentro y hablaron durante pocos minutos antes se subir a un vehículo, reseñó ENews.
Has los momentos La gira de la cantante no ha sido cancelada oficialmente.