La cantante estadounidense Ariana Grande, regresó el domingo a Manchester para ofrecer un concierto benéfico junto artistas como Justin Bieber, Katy Perry y Liam Gallagher con el fin de honrar a las víctimas del atentado del pasado 22 de mayo.
Grande se mostró emocionada y con los ojos llorosos durante todo el concierto «One Love Manchester», puesto que fue precisamente al término de un concierto suyo hace dos semanas cuando un terrorista suicida, Salman Abedi, detonó un artefacto, provocando 22 víctimas mortales, e hiriendo a otras 64 personas, muchas de ellas niños.
Ella concluyó el evento de más de tres horas con una interpretación de “Over the Rainbow”, y al terminar la canción lloró en el escenario mientras la audiencia la aplaudía.
El espectáculo, denominado «One Love Manchester», destinará lo recaudado al fondo de emergencia de la Cruz Roja de Manchester para apoyar a las víctimas del atentado cometido el pasado 22 de mayo por un terrorista suicida, que dejó 22 muertos y decenas de heridos, entre ellos muchos niños y adolescentes.