Justin Bieber estrenó su sexto álbum de estudio, Justice, un trabajo inesperado que el artista canadiense preparó en silencio durante la pandemia y que verá la luz un año después de su anterior LP, Changes (2020).
Sobre el propósito de sus nuevas canciones, el propio músico dijo que “en estos tiempos en que nuestro planeta sufre tanto, la humanidad necesita la curación y también necesita justicia”, de ahí este disco, cuyo propósito es que “proporcione confort y hacer canciones con las que las personas puedan conectar y que se sientan menos solas”.
Bieber dio a conocer en las últimas semanas algunos de los temas que integran este trabajo, especialmente “Holy” junto a Chance The Rapper, pero también los cortes “Anyone”, “Lonely” con Benny Blanco y el más reciente de todos ellos, “Hold on”.
Justice llega tras Changes, que obtuvo tres nominaciones en los últimos Grammy 2020, incluida la de Mejor Álbum Pop Vocal y la de Mejor Interpretación Solista Pop para la canción “Yummy”, aunque no convenció en la misma medida a la crítica especializada, que recibió tibiamente su giro hacia el R&B.
Justice se presenta por tanto como una oportunidad de resarcimiento para Bieber y, sobre todo, como una muestra decidida de su retorno a la actividad musical tras haber superado algunos de sus años más difíciles.
“Me ha costado años recuperarme de todas esas terribles decisiones, recuperar relaciones rotas y cambiar mis hábitos al relacionarme. Afortunadamente se me bendijo con gente extraordinaria que me quiere y ahora estoy atravesando la mejor etapa de mi vida”, celebraba recientemente el intérprete de “Sorry”, en alusión directa a su matrimonio en 2018 con la modelo Hailey Baldwin.