Los fanáticos en oportunidades no saben como reaccionar ante su celebridad favorita, y eso fue lo que le pasó a la cantante Pink, quien se presentó en el programa de Jimmy Kimmel, donde contó una tierna anécdota que pasó con Johnny Depp cuando se lo encontró en una tienda y su esposo la alentó a que lo saludara, pero no se atrevió.
Lo que no se esperaraba la cantante, es que Johnny Depp, el artista de sus sueños, entraría al set ante los gritos de los presentes, Depp saludó a Pink en la frente y a los presentes, la cantante quien no sabía cómo reaccionar ante la sorpresa, solo atinó a sonreír y a decir «no lo puedo creer«. Por su parte el actor se retiró rápidamente del set para evitar que la cantante estuviera más nerviosa.