Caracas 17 de abril del 2023
Coachella se convirtió rápidamente en Motochella cuando Rosalía pisó el escenario principal del festival el sábado (15 de abril).
Las Motomamis y los Motopapis se juntaron cuando escucharon rugir los motores de las motocicletas. Solo significaba una cosa: Rosalía estaba por llegar. Con un casco blanco y negro, pantalones de cuero negro y una túnica rosa fluida sobre sostén negro, Rosalía se convirtió en el centro de atención por su muy esperada actuación en el segundo día del evento de tres días.
“¡Buenas noches, Coachella! Me siento muy feliz de verlos a todos aquí hoy”, dijo Rosalía, quien estuvo acompañada por un grupo de feroces bailarines. “Ustedes me llenan el corazón con su presencia. Soy de Barcelona, por eso este escenario es tan especial. Es por ustedes que estoy aquí”.
Para su set especial, Rosalía trajo el concepto de su Motomami Tour al desierto, construido sobre un lienzo blanco minimalista con múltiples cámaras que transmiten contenido en vivo desde diversos ángulos. La lista de canciones abarcó sus álbumes El Mal Querer y Motomami, incluyendo éxitos como “Saoko”, “Bizcochito” y “La fama”. Para la última, se bajó del escenario con una cámara de mano en modo selfie para capturar a la multitud tomando turnos en el micrófono.
“¿Hay muchas Motomamis aquí esta noche? Las veo a todas”, declaró poco después. Luego cantó “La noche de anoche”, “Despechá”, “Hentai”, “Motomami” y “Candy” antes de revelar su gran sorpresa de la noche.
“¿Cuántos de ustedes ya han escuchado RR?”, preguntó la estrella española. “Hace cuatro años vine a Coachella, y vine sola. No esta vez”. Segundos después, su prometido (y superastro por derecho propio) Rauw Alejandro se unió a Rosalía en el escenario, donde exudaron amor. “¿Qué dice Coachella? ¿Dónde está mi gente latina?” preguntó el hitmaker puertorriqueño a la multitud.
La pareja, que anunció su compromiso el mes pasado, interpretó “Beso” y “Vampiros” de RR, el EP conjunto que lanzaron el 24 de marzo. Después de cantar, besarse y un poco de perrero, ambos bajaron del escenario y se dieron un dulce beso antes de tomar caminos separados. Rosalía regresó al lienzo blanco para sus últimas canciones, entre ellas una emotiva versión de “Héroe” de Enrique Iglesias, así como “Chicken Teriyaki” y “CUUUUuuuuuuute”.
Coachella es parte de la gira de festivales de 20 fechas de Rosalía, que comenzó en Lollapalooza Argentina el 17 de marzo. El recorrido le sigue a su gira mundial Motomami, que recaudó 33,7 millones de dólares y vendió 443.000 boletos en todo el mundo, colocándola en el No. 7 de la lista Top Latin Tours, según Billboard Boxscore.